Desfibriladores que salvan vidas, quien debería tener uno

Venta online sin esfuerzos, ¿se puede? ¿Qué robot aspirador comprar?
desfibrilador ParamedicAlgunas comunidades ya regulan su uso en lugares públicos y con mucha concurrencia. Y es que la presencia de desfibriladores portátiles (DEA) en espacios públicos ha logrado, de verdad, salvar la vida de varias personas. Te contamos cómo son estos aparatos y quienes deben disponer de él.

El desfibrilador externo automático (DEA) es un aparato electrónico portátil imprescindible para tratar una parada cardiorrespiratoria. Su uso permite recuperar el ritmo cardíaco mediante una descarga eléctrica controlada sobre el pecho de la víctima.Además de los desfibriladores  automáticos, también existen los semiautomáticos.

Es muy importante que los equipos de desfibrilación estén muy presentes en los espacios públicos porque su cercanía a la víctima es vital para su supervivencia.  Si se efectúan los primeros auxilios en el primer minuto de la parada, la posibilidad de supervivencia es de un 90%. Este ratio va descendiendo aproximadamente un 10% por cada minuto que pasa. Además, para que se garantice el éxito en la reanimación, el personal cercano al punto en que está el desfibrilador debe tener los conocimientos adecuados sobre el aparato. Por ello, es muy importante exigir a la empresa que instala el desfibrilador un plan de formación para los responsables inmediatos del espacio donde se instala. Los profesionales que venden desfibriladores en SoloStocks así  lo hacen y lo recomiendan.

desfibrilador DESAPara ser más concretos, los desfibriladores en lugares públicos son DESA (Desfibrilador Externo Semiautomático), que están pensados para que los use personal no sanitario. La única diferencia con los DEA es que en los DESA, para realizar la descarga, se deben seguir las instrucciones que el propio aparato da. Se colocan los electrodos en el paciente, el DESA mide el pulso del paciente y obliga a quien atiende a pulsar un botón y alejarse del paciente. Esto es más seguro para el paciente y para la persona que le está ayudando, porque garantiza que no se toca al paciente ni se interfiere con las descargas ni la lectura del ritmo cardíaco.

Los equipos más modernos de DESA cuentan además con un dispositivo de ayuda a la reanimación cardiopulmonar (RCP). Así, no solo emiten la descarga sino que guían durante toda la RCP, indicando si la velocidad y profundidad de las compresiones son las adecuadas. Esta característica confiere a los DESA con ayuda a la RCP en el aparato más aconsejado en la actualidad.

Dónde deberían instalarse los DEA

Cuatro comunidades autónomas han regulado con una normativa propia el uso de desfibriladores: Andalucía, Cataluña, Canarias y País Vasco.  De ellas, la del País Vasco es la ley que impone desfibriladores a más colectivos. En general, están cubiertas las infraestructuras de transporte con gran afluencia de público: estaciones de autobús y tren, estaciones de metro, aeropuertos y puertos comerciales. También establecimientos públicos como centros comerciales, centros de educación como colegios y universidades y centros deportivos (polideportivos, campos de fútbol, piscinas, gimnasios...) con grandes concentraciones humanas suelen estar obligados por ley.

En otros espacios turísticos como campings, hoteles de gran tamaño, centros de ocio, multinacionales y empresas con más 500 trabajadores e incluso en la vía pública si hay personal formado cerca (al lado de un centro sanitario, residencia, ayuntamiento, parque empresarial...) se recomienda su instalación. Los expertos calculan que en unos años las muertes por parada cardiorrespiratoria podrían descender hasta en un 80%, dada la circunstancia de que solo el 1% se produce en entorno hospitalario o cerca, y como decíamos, el tiempo que se tarda en actuar es clave para la supervivencia.